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martes, agosto 16, 2016
Maricela Hernández Jiménez
1965 comienza a trabajar en el ECIL de
Puerto Padre, donde llegó a ocupar el cargo de jefe de distribución por
la responsabilidad y seriedad que le imprime a cada tarea.
Desde la década de los 80 conjugó su vida laboral con los Comités de Defensa de la Revolución, donde fue ideológico en el municipio y desempeño otras funciones tanto en Puerto Padre como en la cabecera provincial, donde estuvo varios años.
Su poder de arrastrar a las masas y vincularse con ellas lo llevaron a obtener diversos reconocimientos y medallas como la 28 de Septiembre, Sello Conmemorativo 20 años de Vigilancia Revolucionaria y la Orden Nacional Frank País, que entrega el consejo de estado.
René Paz Estrada de 73 años de edad, es de esos hombres que entrega todo a los encargos laborales que se le asignan. Así ocupó cargos en el sindicato de la administración pública, llegando a participar en el VII congreso del sector.
EL deseo de hacer bien en la comunidad y luchar por el progreso de la gente unido a sus principios revolucionarios, le merecieron el cargo de delegado, en la circunscripción 111 de Puerto Padre, lo cual ejerció durante 2 mandatos.
Renecito como muchos le llaman cariñosamente en La Villa Azul, es un hombre abnegado que pasó la mayor parte de su vida en el organismo de comunales donde inició en 1988 como jefe de zona en Delicias, para más tarde, debido a los resultados obtenidos, ocupar otros cargos en el municipio, donde fue jefe de higiene y necrología, así como de protección física y defensa, cargo que desempeñó hasta su jubilación en el 2007.
Pero nada es más importante en la vida de este guerrero que sus principios revolucionarios, esos que lo hicieron aprovechar cada oportunidad para superarse políticamente, como los cursos en la escuela nacional de los CDR, el Partido Comunista de Cuba, las FAR y el gobierno.
Es además, fundador de la zona de defensa y el único de su grupo que hoy está en funciones en el municipio.
Ni los recientes problemas de salud, ni las responsabilidades en el hogar han alejado a René Paz Estrada, jubilado de servicios comunales en Puerto Padre de sus deberes con los diferentes organismos. Por su consagración a cada uno de ellos es que hoy de tarde con mi gente lo acoge en su colectivo, al que René desea contarle su vida, Por si muere mañana.
Desde la década de los 80 conjugó su vida laboral con los Comités de Defensa de la Revolución, donde fue ideológico en el municipio y desempeño otras funciones tanto en Puerto Padre como en la cabecera provincial, donde estuvo varios años.
Su poder de arrastrar a las masas y vincularse con ellas lo llevaron a obtener diversos reconocimientos y medallas como la 28 de Septiembre, Sello Conmemorativo 20 años de Vigilancia Revolucionaria y la Orden Nacional Frank País, que entrega el consejo de estado.
René Paz Estrada de 73 años de edad, es de esos hombres que entrega todo a los encargos laborales que se le asignan. Así ocupó cargos en el sindicato de la administración pública, llegando a participar en el VII congreso del sector.
EL deseo de hacer bien en la comunidad y luchar por el progreso de la gente unido a sus principios revolucionarios, le merecieron el cargo de delegado, en la circunscripción 111 de Puerto Padre, lo cual ejerció durante 2 mandatos.
Renecito como muchos le llaman cariñosamente en La Villa Azul, es un hombre abnegado que pasó la mayor parte de su vida en el organismo de comunales donde inició en 1988 como jefe de zona en Delicias, para más tarde, debido a los resultados obtenidos, ocupar otros cargos en el municipio, donde fue jefe de higiene y necrología, así como de protección física y defensa, cargo que desempeñó hasta su jubilación en el 2007.
Pero nada es más importante en la vida de este guerrero que sus principios revolucionarios, esos que lo hicieron aprovechar cada oportunidad para superarse políticamente, como los cursos en la escuela nacional de los CDR, el Partido Comunista de Cuba, las FAR y el gobierno.
Es además, fundador de la zona de defensa y el único de su grupo que hoy está en funciones en el municipio.
Ni los recientes problemas de salud, ni las responsabilidades en el hogar han alejado a René Paz Estrada, jubilado de servicios comunales en Puerto Padre de sus deberes con los diferentes organismos. Por su consagración a cada uno de ellos es que hoy de tarde con mi gente lo acoge en su colectivo, al que René desea contarle su vida, Por si muere mañana.
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