viernes, 26 de agosto de 2016

Del matrimonio de  Sergio y Felicita nacieron 6 hijos formados con educación y amor NO obstante la dura época que vivían. Así, como personas de bien supieron  soslayar las carencias materiales y dedicarles especial atención.
Y fue con esa cimiente de honradez y humildad el mayor de los hijos creció para luego iniciar los estudios en la escuelita de La Morena, donde creó la base para que al triunfar la Revolución integrara el destacamento de jóvenes maestros makarenkos. Con esa convicción y siendo un adolescente escogió el camino y llego a Minas de frío, Topes de Collante y culminó en Tarará, donde se gradúa finalmente.

Su andar por las lomas lo fue forjando como adulto hecho, carácter que demuestra cuando llegó nuevamente a su región de origen y dió el paso al frente para trabajar en escuelas de Manatí, Amancio y Puerto Padre.

Este hombre que vive enamorado del magisterio siempre tiene la sonrisa a flor de labios, sus conocimientos distinguen el nivel de preparación que tiene y la dedicación que siempre le ha puesto a su labor, así lo ven sus compañeros, el alumnado y amigos.
Sergio Peña Peña tiene más de 50 años trabajando la docencia y cuando la Patria lo necesitó se fue a defender al pueblo angolano, donde peleó por la libertad de esa nación, al cabo de los años vuelve a cumplir otra misión, ahora en tierras venezolanas como colaborador, regresando a Puerto Padre con el orgullo de terminarla con resultados sobresaliente.

Ha sido duro para Sergio la pérdida de sus padres, pero ese dolor lo suple con el amor de sus hermanos, esposa e hijas que siguen el legado que él les enseño y hoy son profesionales de la salud y 3 de ellas ya tienen misiones como colaboradoras en Venezuela.

El máster en Ciencias de la Educación, Sergio Peña Peña siente el orgullo de que varias generaciones de puertopadrenses recibieran sus clases en las enseñanzas de primaria, secundaria, preuniversitario y universitaria y se graduaran como profesionales en diversas especialidades.

Hoy Sergio Peña Peña mantiene su condición de militante del Partido Comunista de Cuba, su pasión por el magisterio y los deseos de seguir aportándole a la Revolución su modestia y conocimientos.

Gracias Sergio por ser ejemplo de educador.

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